Grande, pequeño, largo, corto…

Acompañamiento del libro: Ventanas mágicas alocadas. Animales. 
Dentro del pensamiento lógico-matemático de los peques, aprender a asociar objetos y diferenciarlos por colores, tamaños o formas es un paso clave. Esta habilidad les prepara para la clasificación, que consiste en agrupar diferentes objetos según sus características.
Clasificar es una actividad esencial que ayuda a organizar elementos en grupos comunes. Los beneficios son increíbles: fomenta la resolución de problemas, desarrolla el pensamiento lógico y crítico, y mejora la interacción con el mundo. Además, les ayuda a entender que todo es parte de un todo.
La mejor forma de aprender y disfrutar las matemáticas es aplicándolas en la vida diaria. Aquí te dejamos 3 actividades para enseñar a clasificar que puedes hacer en casa con tu peque:
  1. Separa la ropa: Quién diría que lavar la ropa puede ser tan educativo. Además de ayudar en las tareas, aprenderá a clasificar. Pídele que separe la ropa por colores (negra, de color y blanca) o por tipo de prenda (playeras, pantalones, ropa interior, etc.).
  2. Organiza las compras: Ir de compras es muy divertido, y los niños pueden ver cómo los pasillos están organizados por productos similares. Pero el aprendizaje no solo termina ahí, cuando lleguen a casa, acomoden juntos las compras y enséñale dónde se guardan las frutas, las verduras, los lácteos, entre otros.
  3. Clasifica los juguetes: Seguro hay una montaña de juguetes listos para organizar. Jueguen a ordenar todo por colores, formas o categorías (animales, bloques, etc.). ¡Las opciones son infinitas!
¡Todo es parte de un todo! Las matemáticas están en cada rincón de nuestra vida diaria, y con estos ejercicios, los peques no solo aprenden sino que se divierten al máximo. No pierdas la oportunidad de practicar estas actividades y de enseñarles que las matemáticas pueden ser súper entretenidas
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