¿Cómo preparar un espacio en casa para que los niños disfruten del estudio?

Claves para fomentar un ambiente educativo en casa

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No basta con mover los muebles de lugar o embellecer un espacio decorándolo con plantas, hay que entender el ambiente en el que se desarrolla un niño como parte de un sistema más complejo que repercutirá en su crecimiento como un conjunto de factores, pues todos influyen en la reacción de niños y niñas con su entorno social y educativo. Crear un ambiente de aprendizaje en casa es fundamental para el éxito académico y el bienestar de los niños.
El entorno educativo en el hogar también es parte de la calidad del aprendizaje, pues desempeña un papel crucial en el fomento de la motivación, la concentración y el amor por el aprendizaje. Es el espacio en el que un pequeño se siente inspirado, apoyado y capaz de alcanzar su máximo potencial.
Podemos destacar 4 elementos clave para brindarles a tus hijos un aprendizaje adecuado creando un ambiente educativo e inspirador en casa. 
  1. Amor: El elemento clave número 1 para el éxito en casi todo es indiscutiblemente el amor. Aunque es cierto que no se puede vivir ni educar solo con amor, este cumple un papel como un motor que nos impulsa a alcanzar nuestros objetivos. Es especialmente importante aplicar este enfoque en la educación en familia, ya que ponerle corazón a nuestro estilo de vida es fundamental para seguir adelante, sobre todo en los días más difíciles. El amor es un lenguaje que comunica a las personas que se quieren sin la necesidad de emitir palabras.
  2. Respeto: Una educación efectiva en familia debe ir de la mano con una crianza respetuosa. Es fundamental que todos los miembros del núcleo familiar se respeten mutuamente, manteniendo una comunicación efectiva, donde el afecto sea la base del respeto en común.
  3. Disposición: Hablar de disposición significa estar presentes. Es crucial permanecer presentes para los pequeñitos, de esa forma generan confianza y seguridad al saber que pueden expresar sus dudas e inquietudes, aunque en ese momento no podamos responderlas, sabrán que podremos atender esas inquietudes tan pronto como haya tiempo. La disposición también implica estar abiertos a aprender cosas nuevas, de esta forma abrimos una puerta a la transformación personal, algo que puede traer resultados positivos en nuestro estilo de vida. Estar dispuestos a crecer y evolucionar es otra parte esencial en el ejercicio de crianza.
  4. Disfrutar: La educación familiar no tiene por qué ser engorrosa, más bien debería representar una experiencia que se disfruta, tanto para los padres como para los niños. Haz que cada momento sea divertido, para esto posiblemente necesiten tomar un descanso de la rutina, por ello es importante la comunicación y el trabajo en equipo entre padres. No todos los días serán perfectos y puede que haya veces en que los niños sean traviesos o incluso mal portados, pero siempre tendrán el poder de convertir esos malos ratos en días alegres con una buena actitud.
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Reuniendo estos elementos esenciales en casa te resultará más sencillo llevar a cabo el ejercicio de crianza con tus hijos, pudiendo pasar entonces al entorno físico, en el que ahondaremos más adelante. Pero antes, repasaremos algunos elementos igual de importantes que los antes mencionados.
 
  • Estructura una rutina: La organización es clave para establecer un ambiente armonioso en casa, dota a la familia de cierta paz y tranquilidad, por lo tanto, les recomendamos crear rutinas y horarios que ayuden a fortalecer este ámbito.
  • Recursos ideales para tus hijos: Claro que los libros y cuadernos, así como materiales de papelería, son herramientas necesarias para contribuir en el desarrollo del aprendizaje de tus peques, así como una computadora, impresora e inclusive una tableta o un teléfono móvil. Sin embargo, muchas veces los padres se centran en lo material, olvidándose de que el recurso más valioso que podemos brindar a los niños es tu presencia y un buen ejemplo. Los recursos materiales pueden ser prescindibles, pero tu apoyo es realmente importante en su proceso educativo.
  • Participación: La participación de todos los miembros de la familia en la educación de un niño resulta muy enriquecedora para su aprendizaje. Cada persona tiene algo valioso que aportar en el proceso educativo, y esta colaboración contribuye tanto al aprendizaje significativo como a una conexión mágica entre hermanos, primos, tíos, abuelos, etc.
  • Comunicación efectiva: Mantener una comunicación efectiva entre los miembros de la familia es fundamental para crear un ambiente armónico y de aprendizaje efectivo. Muchas veces los padres tienden a pensar que sus opiniones y razonamientos son definitivos, como si fueran los únicos que tienen razón en casa. Sin embargo, cuando nos abrimos a escuchar y permitimos que los niños también participen en la toma de decisiones y dando sus opiniones, podemos transformar esta dinámica en una más beneficiosa y favorable. La comunicación bidireccional, donde se da un espacio para que todos expresen sus ideas y opiniones, nos da la oportunidad de retroalimentar nuestros argumentos y de debatir en un ambiente sano, de respeto hacia todos los miembros de la familia. Esta dinámica enriquece el proceso educativo y fortalece la conexión familiar.
  • Reconocimiento: No olvides reconocer los avances de tus hijos, así sean pequeños, siempre serán significativos, y esto realmente contribuye a crear un ambiente de aprendizaje positivo en casa. Valorar y apreciar sus esfuerzos, así como los propios, fortalece la confianza y motiva su aprendizaje. No subestimes el poder transformador que tiene el reconocimiento en la dinámica familiar.
  • Normas y límites: Las normas de seguridad y comportamiento son la base de una convivencia armónica en casa, estableciendo las bases de comportamiento para el mundo exterior entre los miembros más pequeños de la familia.
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Indudablemente, el mejor ambiente de aprendizaje en casa que podemos proporcionarle a los niños es un espacio respetuoso, libre de expectativas, críticas, malos tratos, etiquetas y regaños. Un lugar donde puedan ser ellos mismos, explorar todo aquello que llame su atención para motivarse a aprender, donde tengan a sus padres y familiares como guías. 
Ya sea en su habitación, la sala de estar, el comedor o un área de su casa que hayan acondicionado como estudio, más allá de lo material, los pequeñitos necesitan la presencia y el ejemplo de sus padres. El ambiente que creamos en casa es fundamental para fomentar su curiosidad, su crecimiento escolar y la confianza en sí mismos.
Puesto que hemos tocado el tema, es momento de desarrollarlo. ¿Cómo deberían ser las características físicas de un espacio en casa adecuado para el aprendizaje de los más pequeños? Cada pequeño es diferente, por lo que es importante adaptar su espacio a las necesidades específicas y preferencias de tu hijo. Un espacio de aprendizaje diseñado para motivar a los niños y facilitar sus habilidades académicas debería, por lo menos, contar con las siguientes características físicas:
 
  • Una buena iluminación, con luz natural y también con lámparas de luz blanca.
  • Debe estar ubicado en una zona tranquila, lejos de distracciones como la TV o ruido constante. Esto promueve la concentración.
  • Un espacio bien definido como un lugar para estudiar, leer, pintar, dibujar, etc.
  • Debe contar con los muebles adecuados, como sillas y una mesa de su tamaño donde puedan colocar sus útiles escolares.
  • El espacio debe estar bien organizado para que los materiales de estudio sean accesibles fácilmente.
  • Si es necesario, debe contar con un espacio para una computadora, una impresora y una conexión a internet segura.
  • Elige colores y un diseño que sea del gusto de tus peques. Colores suaves y una decoración temática pueden ser útiles.
  • Asegúrate de que el espacio tenga buena ventilación para mantener el aire fresco.
La creación de un ambiente de aprendizaje en casa es una inversión invaluable en el futuro de los niños. Al combinar elementos tan importantes como el amor, el respeto, la disposición y la motivación con un espacio físico cuidadosamente preparado, podemos brindar a nuestros pequeños las herramientas necesarias para prosperar tanto académica como emocionalmente.
Más allá de la infraestructura, el apoyo, la comunicación, el reconocimiento y el cariño es lo que en verdad marca la diferencia en el desarrollo infantil. Así que, ¿qué esperan? Pueden preparar un entorno propicio para la curiosidad y el crecimiento de sus peques, no solo estarán proporcionándoles un lugar para aprender, sino también un lugar para soñar y crecer con confianza en sí mismos. Este pequeño esfuerzo forjará los cimientos de un futuro brillante para ellos.
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