Carta pedagógica: Como hablar con los niños sobre… la discapacidad

Carta de Club Libritos
Acompañamiento del libro: Los cuatro amigos de siempre
Los niños y niñas conviven con la diversidad desde sus primeros años de su vida, en especial cuando comienzan a relacionarse con otros niños y niñas de su edad en el colegio, en áreas de esparcimiento, en fiestas familiares, etc. y se percatan de que todos somos distintos y que quizá algún pequeño o adulto a su alrededor tiene una discapacidad.
Cualquier momento es bueno para abordar la importancia de la inclusión, ya que no es algo tabú. Hablar sobre la discapacidad la normaliza. Si tu pequeño te pregunta en algún momento ¿qué le pasa a ese niño?, trata el tema con naturalidad, los niños no tienen prejuicios y hacen estas preguntas porque sienten curiosidad, no porque tengan la intención de ser irrespetuosos o groseros.
Puedes responderle que ese niño o niña tiene capacidades diferentes y necesita un poco más de ayuda que el resto para hacer cosas como hablar, moverse, aprender, etc. También puedes explicarle que todos necesitamos ayuda para hacer cosas que no sabemos o nos cuestan mucho, pero con el apoyo de otros podemos conseguirlo.
Puedes hablarles de las diferencias como algo positivo, ya que todas las personas, a pesar de ser semejantes, somos diferentes, por lo cual todos somos únicos y especiales. La mejor manera de incluir a un peque con capacidades distintas es evitando términos que puedan ser ofensivos o denigrantes, como minusválido o malito. En lugar de eso, enfóquense en sus cualidades, resaltando sus capacidades, virtudes y logros.
Los niños aprenden del comportamiento de los adultos, por eso la forma en la que tratamos la discapacidad, cómo hablamos y nos expresamos del tema es esencial para su entendimiento, para que los niños traten a las personas con respeto sin importar su condición física, social, etc.
Lo que nos une siempre puede más que aquello que nos separa. Aprender esto desde la infancia es clave para aceptar a las personas y poder desenvolvernos en paz en un mundo cada vez más globalizado. Por eso, si los pequeños nos preguntan sobre por qué un niño o niña son diferentes a ellos, debemos explicarles también qué es lo que todos tenemos en común. Es importante dejar claro que son personas como todos nosotros, con cualidades, sueños y esperanzas.
Una forma de fomentar en los niños el valor de la inclusión es a través de juegos o dinámicas. Es útil realizar juegos de rol que permitan a los niños ponerse en el lugar de otros. Un juego con los ojos vendados, una carrera con un solo pie o en donde deban leer los labios de alguien más pueden hacer que los niños entiendan a qué tipo de dificultades se enfrentan las personas con discapacidades en su día a día y cómo les pueden servir de apoyo.
Enseñar a tener empatía y respeto por las personas, sin importar su condición, es fundamental para ayudar a tus pequeños a convertirse en adultos tolerantes y compasivos. Como padre, la mejor manera de inculcar esta enseñanza es a través de tu ejemplo manteniendo una actitud condescendiente, tocando el tema de manera respetuosa y sin tabús. Recuerda que el respeto a la diversidad es primordial para un pleno desarrollo en sociedad.
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