Carta pedagógica: Actividades para estimulación del lenguaje

Alrededor de los 18 meses de vida, tu bebé comenzará a emitir sus primeras palabras. Muchas veces comienzan repitiendo sílabas, al poco tiempo, por eso de sus 2 añitos comienzan a unir las palabras sencillas que conocen para dar paso a emitir frases más complejas. Por lo regular, los pequeñitos empiezan a utilizar verbos y sustantivos en su mayoría. Al cumplir 3 años su vocabulario se conforma por aproximadamente1000 palabras.

Estimular el lenguaje es sumamente importante para su desarrollo infantil, por lo que es recomendable acercarse a su altura para hablar, pronunciando las palabras lenta y correctamente, utilizando apoyos visuales siempre que sea posible para generar una asociación con su entorno.

En Club Libritos hemos enlistado las siguientes actividades para estimular el lenguaje de niños entre 2 y 3 años, para pasar horas de divertido aprendizaje en casa.

1. Caras raras.

El lenguaje es uno de los aprendizajes que surgen a partir de la imitación. Al poner caras raras o chistosas, además de hacer reír a tu bebé le enseñas las diferencias entre expresiones de tristeza, alegría, miedo o sorpresa, entre otras. Aunque todavía no empiece a hablar, estás aportando al desarrollo de su lenguaje corporal.

2. Encuentra el sonido.

Es una variación del juego de las escondidas. Mientras juegan en casa, escóndete de su vista donde puedas observarlo, llama su atención emitiendo el sonido de algún animal que le guste, puede ser un rugido fuerte o el silbido de un ave, igualmente puede ser el sonido de un tambor o una palmada. Comenzará a buscarte y con ayuda del sonido es que podrá dar contigo, con el tiempo comenzará a imitar tu rol mientras juegan.

3. ¿Qué es lo que veo?

Fomenta su vocabulario al salir de compras o de paseo. Dale pistas de algún objeto que esté a su alrededor como “veo una especie de animal con mucho pelo y cuatro patas subido en un árbol que podría ser un…”

4. Golpes y ritmos

Esta actividad se trata de imitar el número de palmadas que escucha tu pequeñito. En una mesa crea un ritmo a base de palmadas e incítale a hacer lo mismo. Conforme las vaya imitando, iremos cambiando el ritmo y aumentando las palmadas para subir la dificultad. Pasarán un rato increíble de risas con una actividad tan sencilla.

5. Equivócate

Jueguen a que te equivocas con las palabras. Si quiere algo del refrigerador, como leche o jugo dile que se llama pan, hazte como si no supieras cómo se llama lo que busca para que te corrija.

6. Cuentos y canciones

Los cuentos y las canciones son siempre un recurso infalible, pero podemos mejorarlos cuando escenificamos lo que decimos. Esto le dará un extra, llamando más la atención de tu hijo y volviendo ese momento más divertido.

7. Onomatopeyas

Las onomatopeyas son los sonidos que hacen las cosas o los animales. Y todo a nuestro alrededor es capaz de emitir un sonido, las puertas (pam), el microondas (ummm), una vaca (muuu), cualquier sonido puede imitarse, lo cual acercará a tu peque al entendimiento de la fonología de nuestro idioma. 

8. Desentierra el tesoro

Para esta actividad necesitarás un paquete de arroz y una bandeja donde depositarlo. Puedes teñir el arroz de su color favorito con colorante natural para llamar más su atención. Después, junta recortes o fotografías de cosas que le gusten como personajes de su película favorita, animales, personas o juguetes.

Después esconde las imágenes en el recipiente con arroz para que las busque. Cuando las encuentre pregúntale ¿Qué es? Repítelo a su lado, después cambien de rol para que ambos se incluyan en la actividad.

9. ¿Qué tengo en la cabeza?

Esta actividad es muy divertida y puede realizarse en familia. Tienes que tomar cosas que tengan en casa y que tu hijo o hija conozca muy bien, puede ser un bote de leche, un paquete de galletas o su plato favorito y ponértelas en la cabeza para preguntarle ¿Qué tengo en la cabeza? Conforme entienda el juego pueden intercambiar los papeles.

10. Mímica

Es una de las actividades de estimulación temprana más recomendadas para estimular el lenguaje. Se recomienda realizarlo en familia, mientras una persona hace gestos o sonidos, el público, entre los cuales estará el niño o niña, deberá adivinar qué está imitando el protagonista. Los juegos de mímica fomentan el lenguaje infantil a la vez que incrementan su vocabulario.

Si encuentras alguna señal de problemas en el desarrollo del lenguaje de tu pequeño o pequeña, acude inmediatamente a consulta con un especialista para saber con exactitud el diagnóstico o la causa de su dificultad. Así un profesional puede brindarles la ayuda necesaria, lo cual es crucial durante sus primeros años de vida para que a través de un tratamiento pueda tener un desarrollo adecuado.